El concepto de «Aquí y Ahora» está muy en boga en las últimas décadas. Son varias las corrientes psicológicas y de autoconocimiento las que se refieren a este término compuesto.
Por ejemplo, el «Aquí y Ahora» no es únicamente el instante y el lugar en el que me encuentro mientras escribo este articulo. El «Aquí y Ahora» es un entorno lleno de acontecimientos que suceden a pesar de mí pero que, sin embargo, estoy experimentando cognitivamente. La creación de los sucesos que volitivamente experimentamos no hacen parte del «Aquí y Ahora», porque quien las crea es un personaje desde su historia y «sentido protagónico».
Imagínate sentad@ en la playa observando el mar. Al advertirlo recuerdas gratamente las vacaciones ocurridas en un entorno parecido. Debes distinguir que una cosa es el mar que observas con tus sentidos y que procesas con tu mente, es decir, sus olas, el cielo, el sol y todos los acontecimientos que hacen parte de ese instante no creado por ti, y que otra cosa son los sentimientos, emociones y todo evento adicional que nace de tus recuerdos.
Para experimentar el «Aquí y Ahora» no es necesario añadir ningún recuerdo propio pues estos contaminan la percepción.
Por esta razón, planteamos dos tipos de PRESENTE. Uno asociado a la Atención Eficiente, y con ello a las respuestas basadas en Habilidades Innatas,y otro asociado a la Atención Intencionada y a las respuestas basadas en los hábitos.
Al primero le llamaremos PRESENTE COGNITIVO y al segundo le denominaremos PRESENTE CONDICIONADO.
De esta manera, el «sentido protagónico» no hace parte del presente cognitivo pero sí hace parte del presente condicionado. El primero nos lleva a la libertad, a la concentración y a estados superiores de percepción no-dual. El segundo, nos encarcela en hábitos y en el egoísmo como intersección de todos ellos.
Si pudieras escoger, ¿en cuál de los presentes planteados te gustaría habitar?
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