En el último taller que dicté en Huesca con el grupo de EAE, trabajamos, entre otras cosas, las modalidades de acción que se plantean desde la filosofía advaîta.
Ya desde la sesión anterior les había solicitado que tuvieran una reflexión como compañía en relación a la ACEPTACIÓN.
Quise enlazar las modalidades de acción tanto a la reflexión como al modelo comportamental de hábitos y habilidades que venimos trabajando ya desde hace dos años.
Mi aprendizaje y enseñanza siempre se ha basado en la filosofía vedanta advaîta. A día de hoy, me queda mucho por aprender, sobre todo, en el apartado metafísico, etcétera pero para mí siempre ha sido necesario un lenguaje cercano, y poder transmitir las más complicadas reflexiones desde lo más práctico, esencial y cotidiano.
La reflexión y lo aprendido por los y las asistentes en los talleres del curso pasado y de este, permiten que los encuentros sean cada vez más profundos e intensos y que nos podamos adentrar desde lo cercano a conceptos cada vez un poco más elevados.
Como he dicho al inicio, en este taller trabajamos de forma teórico-práctica las modalidades de acción según el advaîta, las cuales son:
1.- INACCIÓN: La no realización de la acciones que corresponden hacer en la vida y de las que somos responsables.
2.- ACCIÓN OBLIGADA: el tipo de acción que hacemos por voluntad, apetencia de meta concreta o egoísmo.
3.- RECTA ACCIÓN: aquella acción realizada sin apetencia de meta, sin identificación y sin egoísmo, es decir, el dharma.
4.-RENUNCIACIÓN DE LA ACCIÓN: es un tipo de acción inusual en nuestra sociedad. Es aquella que hacen las personas que ya han tenido la experiencia de Lo Real y no tienen compromiso con la acción a realizar.
Digamos que las primeras 2 tienen que ver con la Atención Intencionada y con los hábitos y las otras dos, con la Atención Eficiente y las Habilidades. Por otro lado y como la RENUNCIACIÓN DE LA ACCIÓN no es fácilmente alcanzable en nuestra actualidad, el tipo de acción que nos interesa es aquella denominada RECTA ACCIÓN.
La recta acción implica la aceptación, el contentamiento ante la vida tal cual es, tal cual viene, respondiendo sin “sentido protagónico”.
Esto no implica no sentir dolor, dejar de responsabilizarse, ni tampoco la desaparición de las dificultades. Esto implica confiar y entregarse a la vida con la certeza de que el diseño que ha confeccionado, es perfecto para el aprendizaje que cada cual debe experimentar.
¿Cuál es el truco entonces?
El truco es permanecer en actitud de eficiencia cognitiva constantemente. Ni más, ni menos.
Os invito a reflexionar sobre cuáles son aquellos hábitos que os llevan a no actuar, a evitar aquello que os toca vivir. También a ver aquellos que implican que actuéis con esperanza de alguna meta concreta o con identificación con la acción.
Pero, sobre todo, reflexionad sobre aquellas respuestas y acciones que realizáis libres de todo apego y esperanza.
Para ampliar información y estudio sobre las modalidades de acción, en concreto, sobre la recta acción, recomiendo el libro de Sesha titulado “El sendero del Dharma”, 2011. AFVAS, España.
De entre sus libros, es mi favorito. En el link lo podéis encontrar y descargar gratuitamente en formato de audio o de lectura.
¡Es una auténtica delicia!
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