Ana Arana es compañera de estudio del advaîta desde hace años. No…
Agustina también participa en el curso de Educación y Meditación. Es de Argentina. La conocí en un internado de Sesha. Risueña, curiosa y despierta.
Tiene un gran compromiso consigo misma, con el autoconocimiento, con el conocimiento del Ser y con la educación. Da gusto ver que aprovecha infinitamente los cursos que impartimos.
Hoy comparto el cuento que elaboró para el encuentro de Habilidades dentro de las tareas encomendadas.
Espero verla pronto en persona y darle un abrazo.
Aquí os dejo con el cuento…
LAS SEMILLAS DE PRIMAVERA
La primavera comenzaba a abrirse paso, dejando atrás el frío y quieto invierno.
En el entorno se podía comenzar a apreciar la gama inmensa de tonalidades verdes que ofrecen los árboles y arbustos, los nuevos brotes que empujan la vida y los variados e intensos colores de las flores, los frutos, las mariposas y colibríes.
En el aire, las más sutiles y exquisitas fragancias, que en cada inhalación endulzan el interior, la melodía de los cantos de las aves y sus vuelos majestuosos.
En este deleite que invade y expande los sentidos se encontraba nuestro niño, percibiendo tanta vida, inmerso en ese equilibrio entre lo fuerte y lo frágil que ofrece la naturaleza. Los jardineros invisibles no sólo trabajaban en ella, sino que también sembraron semillas en el corazón del pequeño. En ese instante, una de estas semillas comenzó a germinar y a despertar el anhelo en potencia de compartir su alegría con una mascota.
El pequeño fue corriendo en busca de sus padres para pedirles que por favor le dejen compartir y cuidar de una.
Parece que en esta ocasión su sed estaría a punto de ser saciada.
Sus padres le hablaron de la gran responsabilidad que conlleva tener una mascota y le dijeron también que piense y reflexione atentamente sobre qué tipo de animalito iba a ser afín a él, ya que a nuestro pequeño le gustaban todos los animales.
Para ayudarse a definir cuál sería su compañero ideal busco respuestas en sus vecinos cercanos, quienes ya tenían experiencia en la convivencia con variados animales.
En esta indagación aprendió muchísimo y quedó sorprendido, por ejemplo, por las cualidades de los gatos. Sus vecinos le contaron que son muy curiosos, muy ágiles, casi siempre muy precisos en sus movimientos, que saltan alto y pueden llegar a veces a lugares inaccesibles a simple vista, y que son muy limpios. También le dijeron que son muy independientes, buenos cazadores de ratoncitos, pajaritos, mariposas, alacranes.
Sólo se dejan mimar y agarrar cuando tienen ganas y están a gusto, por lo que algunas veces cuando esté con sus amiguitos probablemente se escondan y no quieran jugar con ellos.
Asimismo, le gustó mucho lo que le contaron de los perros, qué son super amistosos, juguetones, muy sociales, corren rapidísimo cuando están alegres y excitados. Quieren seguirte a todos lados porque son dependientes, y que cuando no estás se ponen muy tristes. También requieren tiempo para aprender reglas de higiene y convivencia porque cuando son cachorros muerden y rompen casi todo lo que encuentran a la altura de su boca. Muchas veces son guardianes y probablemente darían la vida por su amigo humano si está en peligro.
Y también quedó impactado con los caballos, parecen imponentes, fuertes, resistentes. Le contaron que son muy sociales, inteligentes, sensibles, viven en manadas y se organizan en función de jerarquías. El líder cuida de todos. Captan las emociones de los humanos a través del lenguaje del cuerpo y hasta pueden espejarte los estados de ánimo.
Son muy nobles y muchas veces te ponen a prueba para saber si al lado tuyo están seguros, y hay que saber de su manejo correcto porque si no pueden volverse mañosos y hasta peligrosos.
Para nuestro pequeño la elección fue muy fácil…
¿A vos cuál te gustaría?
¿En qué orden los pondrías si tuvieras que elegir desde el que más a menos te gusta?
*Imagen Cabecera: https://www.pexels.com/es-es/@ming-zimik-2774782
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